El camino de la vida.

Es irónico que la vida puede ser tan oportuna e imprudente, que no haga otra cosa que llevarnos de acá para allá a toda velocidad. Cuando arranca, lo hace para no volver a detenerse, y sí lo hace, lo hace para siempre.. Es simple de entender viene sin frenos. Es raro ver como la nuestra choca con la de otros de forma inesperada, y ver como estas cambian de camino. Más raro es de entender como unas corren caminos tan simples, mientras que otras le tocan peores cambios.
Y luego te pones a pensar ¿Por qué no un cambio? Si vamos viviendo tan rápido que acabas dandote cuenta de que no te acuerdas ni de la cuarta parte de la que recorriste. Te centras tanto en tu rutina, que te olvidaste del sentido del viaje. Baja la velocidad, presta atención, saca la cabeza por la ventanilla y mira un poco a tu alrededor. Cuando te encuentres en un túnel, alégrate porque en algun momento va a terminar, como todo. Nada es para siempre.